La modelo uruguaya Romina Gachoyha compartido detalles sobre la crianza de los hijos deAngie Jibaja y Jean Paul Santa María, abordando la compleja dinámica familiar y la decisión de los menores de distanciarse de su madre biológica.
En una entrevista con Karla Tarazona para el programa 'Mamá 24/7', Gachoy desmintió las acusaciones que la señalan como responsable de alejar a los niños de Jibaja. Explicó que, a medida que crecieron, los propios hijos optaron por limitar el contacto con su madre. "Hay mucha gente que cree que uno los ha distanciado del vínculo con su mamá y eso es totalmente falso", afirmó.
Gachoy detalló que, cuando los niños eran más pequeños, tanto ella como Santa María los motivaban a mantener una relación con Jibaja. Sin embargo, las experiencias posteriores a las visitas influenciaron la percepción de los menores. "Nosotros hasta cierta edad les decíamos 'anda', los influenciábamos a que vean a su mamá, pero el problema era cuando ellos regresaban", comentó.
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Siguiendo las recomendaciones de profesionales en psicología, la pareja decidió respetar los deseos de los niños respecto a las visitas. Los especialistas les advirtieron que obligarlos podría ser contraproducente:"A nosotros los psicólogos nos decían 'lo que está haciendo es hacerlos sentir que es una tortura u obligación ir a donde no les hace bien'",recordó Gachoy.
La modelo enfatizó que la decisión de distanciamiento fue tomada por los propios menores y que no necesariamente es definitiva. "Hubo un tiempo en que ellos decidieron tomar una distancia, eso no quiere decir que sea para siempre", señaló, subrayando que la situación depende de factores fuera del control de la familia.
Además, Gachoy expresó su deseo de que Jibaja pueda recuperarse y demostrar un cambio positivo, lo que facilitaría la reconciliación con sus hijos. "Me encantaría, de corazón, que cuanto antes pueda haber de la otra parte una recuperación y ganas de hacer las cosas bien", manifestó.
La situación refleja los desafíos que enfrentan las familias en contextos de separación y la importancia de priorizar el bienestar emocional de los niños, respetando sus decisiones y necesidades afectivas.
